Maldito Sea el Destino...

Hoy quiero compartir con vosotros algo que escribí hace algunos meses. (Es posible que a algún que otro lector le suene de algo algun trozo del texto. Os pido por favor que no digais de qué os suena... ;-), vale? Ya sabéis a lo que me refiero...o eso espero, jajaa..).

Pues bien, sigo. El pasado mes de febrero la presenté a un concurso de cartas de amor y desamor que el Ayuntamiento de Gines (un pueblo de Sevilla) celebra por San Valentín desde hace algunos años. De antemano os lo digo.. no gané el premio (es que el jurado, no tiene ni idea... jajaja...; no hombre, la carta que ganó era muy buena).

No sé por qué pero nunca tuve demasiada intención de publicarla en El Mundo de Angie; bueno, en realidad sí lo sé, simplemente no quería hacerlo, no me apetecía. Pero he cambiado de opinión. Llevo varios días queriendo publicarla para compartirla con vosotros.

***

"Hola, mi amor:

Hoy hace un mes y me parece mentira estar diciendo esto.
Un mes sin verte y que se me ilumine el alma.
Un mes sin perderme en tu sonrisa.
Un mes sin navegar en tu mirada.
Un mes sin sentir el calor de tus brazos.
Un mes sin que los latidos de nuestros corazones vayan al unísono.
Un mes que no te encuentro en la suavidad de tu piel.
Un mes sin pasear juntos por los jardines terrenales del Edén.
Un mes sin saborear tus besos.
Un mes sin que revoloteen contentas las mariposas de mi estómago.
Un mes sin derretirme con tus "te quiero" susurrados al oído.
Un mes sin embriagarme de tu aroma.
Un mes que tu princesa te llora sin consuelo.
Un mes sin ti.
Un mes caminando sola.

Sólo hace un mes y me parece toda una eternidad.
Una eternidad hecha de minutos que no pasan, se arrastran.

Una eternidad es lo que hubiera deseado vivir junto a ti, pero una encrucijada del destino dispuso que nuestros caminos se separaran sin aviso, sin mediar palabra.

Intento no pensar que todo lo que nos ocurre en la vida tiene un porqué o sucede sin más, no pensar por qué me tuvo que tocar a mi sufrir esta agonía que me ahoga el alma e inunda mi corazón de amargas lágrimas. ¡Intento no pensar por qué te tuvo que pasar a ti!

Dicen que el tiempo irá cicatrizando poco a poco mis heridas, que irá suavizando el dolor y aprenderé a vivir sin ti; ¡pero eso no me consuela hoy! ¡Qué no daría yo por decirte una vez más “Te quiero” acariciando tu alma a través de nuestras miradas cómplices!

¡Maldito sea el destino que nos separó!
¡Maldito sea el destino que robó nuestros sueños e ilusiones!
¡Maldita sea la carretera que te apartó de mi lado para siempre!

¡Hoy hace un mes y me parece mentira, mi amor!
¡Qué no daría yo por enviarte esta carta sellada con un beso!
Pero los carteros no reparten en el cielo..."

***

Quien me conozca un poquito verá que es "Angie en estado puro". Me atrevería a decir que de todo lo que he escrito, no sólo en el blog sino a lo largo de toda mi vida, es uno de mis mejores escritos y, sobre todo, uno de los más especiales. Lógicamente, digo esto porque así lo siento yo, simplemente, para mi es especial por todo lo que significa para mi, por cómo me sentía en el momento en que lo escribí. Espero que os guste.

Tengo que decir una última cosa más, antes de que, por un momento, dudeis si me tocó vivir en mi vida algo tan terrible como esto. AFORTUNADAMENTE, NO. El trágico final de esta historia, la muerte del ser amado, no está basado en una experiencia propia. En cuanto a todo lo demás... Salvando las distancias, quién no sintió alguna vez en su vida el tremendo sentimiento de pérdida, impotencia y tristeza de una ruptura que te parte en mil pedazos el corazón haciéndote sentir el dolor a chorros...